BARCELONA, España — Cristiano Ronaldo volvió a marcar, Keylor Navas mantuvo una vez más su arco invicto y el Real Madrid ganó el sábado por 3-0 al visitante Levante para tomar provisionalmente la punta de la clasificación de la liga española por el arranque de la octava fecha.
El arquero costarricense, que solo ha encajado dos goles en el campeonato y ninguno en su estadio, volvió a brillar por el cuadro madridista, que se benefició de los tantos del lateral Marcelo a los 27 minutos, Cristiano (30) y Jesé Rodríguez (81) para tumbar al equipo levantino, actual 18vo clasificado en el campeonato.
Cristiano, que presentó su cuarta Bota de Oro (como máximo cañonero de las ligas europeas, con 48 redes) a la afición "merengue", suma ya seis tantos en la liga, los mismos que su compañero Karin Benzema, quien no pudo jugar por lesión, y celebró una diana por primera vez desde la tercera fecha, cuando registró sus otros cinco goles en un mismo partido contra el Espanyol.
"El 3-0 refleja lo que es nuestro equipo: pegada y sin encajar un gol gracias Keylor y un gran trabajo defensivo. Cristiano trabajó y tiró del carro", resumió el técnico Rafa Benítez, mientras el central Nacho Fernández elogió la labor de Navas. "Keylor está para parar. Es un grandísimo portero y lo está demostrando en todos los partidos. Es un placer tenerlo, porque transmite mucha seguridad", comentó el canterano.
Con 18 puntos actuales, el Madrid desbancó transitoriamente del liderato al Villarreal, que suma 16 unidades y recibe el domingo al Celta de Vigo. Los celtiñas cuentan los mismos 15 puntos que el Barcelona, rival del Rayo Vallecano a continuación en la jornada, que registró también la igualada 1-1 entre Eibar y Sevilla. Borja Bastón (8) abrió la cuenta por los locales, actuales sextos, pero Kevin Gameiro (71) niveló por los sevillistas, que marchan décimos.
La programación sabatina se completa con los cruces Valencia-Málaga y Betis-Espanyol.
El Levante plantó cara al Madrid con un entramado defensivo notable que buscó la constante descarga en las carreras de Deyverson y Roger Martí, vivos a la hora de buscar la espalda de los zagueros de un Madrid claramente adormecido en el arranque y negligente en la presión sobre la salida de balón rival.
Quien anduvo enchufado desde el minuto uno ante su ex equipo fue Navas, capaz de desviar a tiro de esquina un latigazo escorado de Roger, con alteración envenenada de Raphael Varane.
Arriba, el Madrid llegaba poco y mal. Sin el imaginario del colombiano James Rodríguez ni la alteración rítmica de Luka Modric, ambos fuera por lesión, los blancos naufragaban en la elaboración pese a los esfuerzos de Casemiro, escasamente asistido por Mateo Kovacic y Toni Kroos. Un disparo lejano del brasileño y un cabezazo de Gareth Bale, también alto, fue de lo poco que ofreció el equipo dirigido por Rafa Benítez antes de decantar la balanza. Mientras, el Levante seguía con su táctica de la catapulta y encontraba mejores resultados, como cuando Deveyrson y Roger se enredaron en un balón colgado por José Morales y neutralizado finalmente por un felino Navas.
Pero la ocasión pareció despertar al Madrid, que encontró el alivio en la banda izquierda de Marcelo, rápido para robar una pelota a Morales y combinar con Cristiano, generoso en la vuelta al centro que el lateral no desperdició, fusilando a Rubén Martínez al primer poste.
Los levantinos no desfallecieron, y volvieron a obligar a Navas a una gran intervención mediante cabezazo picado de Deyverson, aunque nuevamente la acción del arquero pareció provocar la activación de sus compañeros: Kroos le birló el balón a Zouhair Feddal en zona de compromiso y la cedió a Cristiano, quien aprovechó el desmarque de Bale, ajustó el punto de mira desde el balcón del área y lanzó una comba imposible para la estirada del arquero.
Bale, cuyos gemelos llegaban castigados tras jugar con la selección de Gales, dejo su sitió a Lucas Vázquez al descanso, quizás pensando en el compromiso de Liga de Campeones, el martes contra el Paris Saint Germain. El Levante también ingresó a Nabil Ghilas, igualmente frustrado por Navas en su intento de control y remate frente al arquero "tico", quien respiró hondo cuando Nacho Fernández tapó otro disparo de Deyverson, y acabó celebrando una nueva blanqueada ante su ex equipo.
Cristiano buscó el tercero por vía aérea y no lo encontró, pero vio como Rodríguez se reivindicó saliendo desde la banca con el primero de su cuenta particular.